Parece increíble que ya hayan pasado dos años desde que comenzó la pandemia, ¡qué rápido se acostumbra el ser humano a los cambios! ¡Increíble! Ojalá volver a esos tiempos en los que, cuando hablaba de ponerme una mascarilla, me imaginaba en casa haciendo el típico ritual nocturno antes de acostarme. Tiempos en los que tener tos y dolor de garganta no implicaban más que un catarro; o esos en los que podías dar abrazos y besos libremente (algunos sé que agradecéis que estos se hayan limitado; yo los echo de menos) sin pensar en un posible contagio.
Aunque parece que dos años después la situación está controlada hemos cambiado tanto… Para mí el mayor logro, sin duda alguna, es la importancia que se le ha dado a la salud mental (no por parte de los políticos, eso sí), si no que, entre nosotros, especialmente los jóvenes, nos hemos dado cuenta de que es básico para vivir (sobrevivir en algunos casos). Si nuestros pensamientos y nuestra cabeza no están bien ¿Cómo vamos a hacer frente a nuestro día a día? Quizás previamente al COVID no estábamos en nuestro mejor momento; puede que viviésemos a tal velocidad que no nos parásemos a pensar y analizar lo importante que es sentirse bien, saber estar a solas con uno mismo y el autocuidado (no solo a nivel físico).
No soy psicóloga ni experta en el tema, pero me encanta leer, informarme y aprender y, cuanto más lo hago, más consciente soy de que trabajar en uno mismo es fundamental y que, aunque suene egoísta, es importantísimo hacerlo ya que hará que nos sintamos mejor y, en consecuencia, favorecerá a todo nuestro entorno. Eso lleva a que existan personas que, cuando nos juntamos con ellas, nos dan un chute de energía; otras, por el contrario, nos la quitan. Se agradecen las personas vitamina.
Si estás leyendo esto posiblemente pienses “menudo mix de ideas tiene esta chica en la cabeza”, pero al principio de cada mes me fascina hacer borrón y cuenta nueva y dejar cosas atrás; pensar que el cambiar de mes son nuevas oportunidades y que todo lo que llegue será para mejor.
Os deseo a todos un feliz abril y os recomiendo juntaros con personas vitamina. Creedme, os harán bien.
No os olvidéis de seguirme a través de Instagram en @beasanfa.